Para limpiar el frigorífico, lo primero es desconectar el aparato. Vacía su interior y ponlo en un lugar fresco. Lo recomendable es guardarlo junto a bolsas de hielo o en alguna bolsa térmica. Es importante utilizar una bayeta, con agua templada y algún producto adicional neutro. También, para limpiar la goma de la junta de las puertas es importante no reutilizar agua, tiene que estar limpia y asegurarnos de que tras su limpieza queda 100% seca.
Tras finalizar el proceso de limpieza, hay que conectar de nuevo el frigorífico. Introduce de nuevo los alimentos en su interior. Si quieres que adquiera más rápido la temperatura optima interior tanto el frigorífico como el congelador, activar las funciones “Súper Refrigeración” y “Súper Congelación”.
Tienes más información sobre cómo limpiar el frigorífico en nuestro blog.
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